Escritura creativa (Poesía).

Almudena Guzmán, licenciada en Filología Hispánica. Hasta hace poco colaboraba con artículos de opinión en el diario ABC y en el suplemento cultural del mismo.
Comenzó a escribir poesía cuando apenas tenía 15 años, y ha obtenido varios premios y reconocimientos, entre ellos el Premio Hiperión por su obra Usted (1986), el Premio Ciudad de Melilla por El libro del Tamar o el Premio Internacional de Poesía Claudio Rodríguez por su obra El príncipe rojo (2006).

El pasado día 15 de abril de 2013 vino a la Facultad de letras de Ciudad Real para impartir una clase dentro de la asignatura Escritura creativa. En ella nos habló del proceso de creación poética desde la perspectiva de alguien que se dedica a ello. 
En primer lugar nos habló de que lo más importante para crear un poema era el sentimiento. El sentimiento, para ella, se opone a las sensaciones que son impresiones que nos llegan a través de los órganos sensitivos. El sentimiento es subjetivo, pero la sensación es algo objetivo. 
Después, leímos un poema de ella:

Señor,
usted no lo sabe
y sin embargo sus arrugas,
tersándome la mañana,
me han obligado a iniciar una huelga de novios
desde que lo conozco.

Y hoy
-mientras los dos nos mirábamos de reojo, cada uno
en un extremo de la barra-,
mi guedeja más anarquista
ha optado definitivamente por afiliarse a sus ojos.

Almudena Guzmán

A partir de este poema hicimos una reelaboración desde nuestra perspectiva poética, tratando el mismo tema (alumno o alumna que se enamora de su profesor o profesora y se encuentran en un bar). El que yo hice es este:

Entre apuntes, redacciones y trabajos,
Siempre tú.
Guardo tu sonrisa en un Word,
Almaceno tus miradas en un archivo de Excel
Y recuerdo tus gestos como si de diapositivas de
Power point se tratasen.

Y ahora que te veo en este bar,
Se ralentizan todos mis circuitos;
Si me miras no me sale qué decirte.
Y quiero formatear mi disco duro
Para empezar contigo esta página en blanco.

Con este ejercicio se pretendía demostrar que cuando uno escribe sobre poesía puede explicar otras sensaciones, aunque no sean suyas propias. Se demuestra una vez más que lo más importante para escribir poesía es el sentimiento.
El segundo ejercicio consistió en escribir un poema sobre lo que quisiéramos. Algunos compañeros salieron a la pizarra y hablamos sobre la razón por la que cada uno escribió ese poema. Después votamos el poema que más nos había gustado entre los compañeros que salieron a la pizarra y tratamos de mejorar uno de esos poemas. Al final fue Almudena la que cambió algunos elementos del poema, para entre otras cosas, darle ritmo. 
En el tercer ejercicio hicimos lo que se llama “un cadáver exquisito”. Almudena lo comenzó con un verso que fue continuado por el resto de participantes. Este ejercicio Almudena Guzmán lo propone para cuando el poeta no está inspirado. Otro ejercicio para parecido fin trataba de hacer un poema al estilo de los surrealistas, utilizando la “escritura automática” pero con control. Así salen imágenes sugestivas pero el poema tiene sentido.

Por último, hablamos del ritmo. Según Almudena Guzmán el ritmo es una combinación armónica de símbolos y palabras. Esto lo ejemplificó con este poema de Rubén Darío:

Ama tu ritmo y ritma tus acciones
bajo su ley, así como tus versos;
eres un universo de universos
y tu alma una fuente de canciones.
La celeste unidad que presupones
hará brotar en ti mundos diversos,
y al resonar tus números dispersos
pitagoriza en tus constelaciones.
Escucha la retórica divina
del pájaro, del aire y la nocturna
irradiación geométrica adivina;
mata la indiferencia taciturna
y engarza perla y perla cristalina
en donde la verdad vuelca su urna.

Rubén Darío

El poema de Rubén Darío quiere decir que cada cual tiene que buscar su propio ritmo. También añadió Almudena que la rima y el ritmo son cosas distintas, puesto que hay poemas en versos blancos que aun así tienen ritmo. El último ejercicio propuesto tiene que ver con el ritmo. En él tuvimos que transformar un poema de Almudena Guzmán en otro que dijera lo mismo pero con ritmo de rap. 

En general, la clase se desarrolló en un ambiente divertido y espontáneo, ideal para que fluya la poesía. Además, creo que fue un privilegio para todos nosotros que nuestro primer acercamiento a la creación poética viniera de la mano de alguien como Almudena Guzmán, de tan reconocido prestigio. 

Francisco Rodríguez.

No hay comentarios:

Publicar un comentario